Meta:

viernes, 7 de diciembre de 2012

Él, es un sueño.

No es posible vivir soñando, porque así te ahogas en tus propias esperanzas sin ni siquiera tratar de nadar a la realidad, pero ¿qué en realidad creo yo?, que por más que sueñes eso solo seguirá siendo "un sueño más", a menos que luches contra todo y todos por alcanzarlo.

Vivir con este agujero en el pecho ya por varios años es algo de lo que uno tenga que cansarse, cansarse de tener que lamentarse no estar bien, cansarse de llorar, nada más doloroso que una herida que no cicatrizará nunca hasta que lo que nos atormenta se vuelva solo un recuerdo malo.
No importa con quien o dónde esté pero aquel agujero en mi pecho siempre está punzante y doloroso a cada segundo, quisiera poder hacerlo desaparecer, pero no es fácil, y tampoco es algo que esté en mis manos. Cada día es un golpe más que me condena a seguir en esto, lejos de todo lo que quiero, lo que amo, lo que deseo. Es tan difícil pensar claro aveces cuando simplemente quieres que todo acabe, porque cada segundo a solas en un martirio en una mente así de frágil como la mía.
¿Porqué no estás aquí? Desearía que estés a mi lado, ya que es tan fácil desear que las cosas sucedan pero difícil verlas suceder.
Me has encarcelado en un mundo donde tú eres el mayor gobernante, el que gobierna mi corazón, temeroso ante todo, pero no ante el otro chico, muy bien sabes que no habrá otro que tenga mi completo amor, aunque todo eso es parte de mi mundo, un mundo que no has visitado, y miras con presunción, pero si pudieras tan solo leer mi mente, te mostraría la verdad de mis palabras y promesas. Los engaños, las mentiras y la gente falsa te ha dejado cegado ante la gente que vale la pena, y te entiendo, mejor dudar que salir con el corazón roto, ¿verdad? tal como dice la frase "Justos pagan por pecadores". Sé como te sientes al respecto, la soledad nunca fue tan bonita del todo, pero hay que esperar para que las mejores cosas en la vida vengan, aunque por mi parte, debo admitir, que detesto esperar. Lo siento si no puedo llegar rápido, en ese entonces si tu hubieses encontrado a otra, tristemente lo aceptaría, y aceptaría también el hecho de vivir para siempre con este agujero en mi pecho que cada día de mi vida se agranda, y este me haría recordarte y sonreír hacia un futuro que no pude tener a tu lado.
No te odiaría, te seguiría amando, y susurraría cada noche "Gracias Bill, por haberme enseñado a enamorarme y a caer en una ilusión".
Mi amor por ti quedarían en las páginas de un libro que hago por ti, para que sepas lo que de verdad sentí y nunca te pude decir, pero es mejor así, ya que a las palabras se las lleva el viento


No hay comentarios:

Publicar un comentario